
Dado el contexto con el que nos toca pasar este 2020 debemos estar cada dia mas informados en este caso contamos con información que viene directamente de los dispositivos DetectAR seguí leyendo y te contamos más.
La Ciudad está llevando a cabo una política de testeos inteligentes en pos de lograr la detección temprana de casos para mitigar los contagios a lo largo del territorio porteño. El Operativo DetectAR es uno de los pilares centrales de la estrategia y hoy ya tiene presencia en un total de 17 barrios porteños, con una nueva ampliación cada dos días.
Desde el comienzo de la emergencia sanitaria, ya se realizaron 85.363 hisopados y el 35% resultaron positivos. Ese porcentaje asciende a 41% cuando se tienen en cuenta los 20.752 testeos que se llevaron adelante a través del DetectAR.
En la actualidad, en todo nuestro territorio porteño se han realizado alrededor de 2.200 hisopados diarios y el objetivo es alcanzar un estimado de 4 mil, en conjunto con el sistema privado. La cantidad de testeos fue aumentando de manera sostenida desde el inicio de la pandemia y tuvo un cambio de estrategia importante a partir de la implementación de la búsqueda activa por medio del DetectAR. A mediados de abril se realizaban 250 PCR por día, 850 a mitad de mayo y 1000 a principios de junio. Es decir, en dos meses y medio, se aumentaron 9 veces la cantidad por jornada.
La estrategia de testeos se basa en tres ejes centrales. En primer lugar, la búsqueda activa ‘puerta a puerta’ a través del Operativo DetectAR que lleva adelante la Ciudad en conjunto con el Gobierno Nacional desde el 5 de mayo. En segundo lugar, la atención espontánea de vecinos en las 20 Unidades Febriles de Urgencia (UFU’s) que se crearon específicamente para este fin. Y en tercero, los testeos rápidos, preventivos y sistemáticos, a las alrededor de 40 mil personas que trabajan en los hospitales públicos, independientemente de su tarea, y a los aproximadamente 10 mil empleados de los geriátricos. Son establecimientos que concentran a dos de los subgrupos de la sociedad más vulnerables frente al virus: el personal de salud y los adultos mayores, por lo que necesitan de políticas públicas específicas pensadas para su cuidado.