
Con la Navidad y el Año Nuevo a la vuelta de la esquina, la Ciudad de Buenos Aires se viste de luces y color para recibir las festividades. El 8 de diciembre marca el inicio de los preparativos, desde la instalación del tradicional arbolito hasta la iluminación de las calles con motivos navideños.
Este año, el traspaso de mando en la gestión de la ciudad coincidió con la inauguración de las festividades navideñas. Jorge Macri, el nuevo jefe de Gobierno, encendió las luces junto a su pareja, María Belén Ludueña, simbolizando el comienzo de un período de esperanza y prosperidad para todos los porteños.
El Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana, bajo la dirección del ministro Ignacio Baistrocchi, desplegó una serie de árboles navideños en distintos puntos de la ciudad. Estos árboles, de 11 metros de altura y adornados con 23.500 luces LED, iluminarán plazas y espacios públicos en cada una de las comunas, creando un ambiente festivo para todos los habitantes.
Además de los árboles, se han instalado más de 900 luces LED con motivos navideños en calles y lugares emblemáticos de la ciudad, como la Avenida de Mayo, la Plaza San Martín y la Avenida 9 de Julio. Esta iniciativa busca embellecer aún más la ciudad y crear un ambiente festivo para residentes y visitantes por igual.
Sin embargo, mientras la ciudad se prepara para las celebraciones, muchos argentinos se enfrentan a la realidad de los aumentos de precios. El ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, anunció medidas que afectarán a los consumidores, con incrementos significativos en productos esenciales como la sidra y las garrapiñadas.
A pesar de los desafíos económicos, los porteños se preparan para disfrutar de las festividades navideñas, compartiendo momentos de alegría y unión en medio de las luces y decoraciones que iluminan la ciudad.