
El ministro dejó en claro que el cierre de un recién descubierto búnker de drogas no es solo un acto, sino un enérgico compromiso para “devolver la libertad y seguridad a los vecinos, expulsando a los narcotraficantes y colocándolos en donde realmente pertenecen, que es tras las rejas”.
Por otro lado, el director general de Seguridad Comunal e Investigación Criminal, Maximiliano Piñeiro, recordó con énfasis que desde que la Policía de la Ciudad asumió la responsabilidad de salvaguardar todo el Barrio 21-24 Zavaleta, se ha avanzado incansablemente en investigaciones que buscan clausurar los puntos de venta de narcomenudeo, que consistentemente han sido fuente de problemas para los residentes y su seguridad.
El enfoque es inconfundible: “Cerrar esos establecimientos y enfrentar con determinación a estas organizaciones criminales”, subrayó Piñeiro, enfatizando que es un objetivo primordial del Ministerio de Justicia y Seguridad.
En este contexto, el jefe de la Unidad Barrial 21-24/Zavaleta, comisario Sergio Rodríguez, describió la labor esencial de su equipo: “Acercamiento, comprensión de las problemáticas de los vecinos y, en última instancia, brindar asistencia y soluciones a sus preocupaciones”. Rodríguez afirmó que, tras la clausura de estos lugares, el personal de la Unidad Barrial se mantiene en custodia, asegurando que estas viviendas no vuelvan a operar como centros delictivos.
Los procedimientos ejecutados por la División Sumarios y Brigadas de la Comisaría Comunal 4 de la Policía de la Ciudad tuvieron como objetivo cuatro domicilios en el Barrio Zavaleta, como parte de una investigación enmarcada en la Ley de Drogas 23.737.
Los allanamientos fueron autorizados por el Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas 11, a cargo del doctor Marcelo Bartumeu Romeo, bajo la supervisión de la Unidad Fiscal Especializada en Investigación de Delitos Vinculados con Estupefacientes del doctor Federico Eduardo Ghisio.
En uno de estos allanamientos, en una vivienda de la Manzana 20, se produjo la detención de una mujer de 27 años. Durante la operación, se incautaron 120 dosis de cocaína, 23 gramos de marihuana, 63 dosis de pasta base, tres municiones calibre 9 milímetros, dos teléfonos celulares, herramientas utilizadas en el proceso de distribución de estupefacientes y la suma de 4.600 pesos.
En otra intervención, que tuvo lugar en un departamento del tercer piso de un edificio en Agustín Magaldi al 1200, en las periferias del barrio, los efectivos decomisaron 35 bolsitas de marihuana, cinco bolsas de sustancia blanca para corte de droga, una dosis de cocaína, una pistola 380 marca Ruger corto, una réplica plástica de pistola calibre 9 milímetros, un teléfono celular y tres llaves de automóviles.