
La Policía de la Ciudad lideró una inspección en un geriátrico ubicado en el barrio de Villa Lugano, que culminó con su clausura por parte de la Agencia Gubernamental de Control (AGC) debido a la detección de irregularidades en su habilitación.
La División Delitos Contra la Salud y Seguridad Personal, adscrita al Departamento Delitos Contra la Salud Pública de la Policía de la Ciudad, coordinó la inspección en colaboración con el Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ) y la AGC, tras recibir una denuncia del Ministerio de Salud sobre posibles irregularidades en la documentación del establecimiento.
La Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Número 39, dirigida por el doctor Hernán Biglino, autorizó la acción en la propiedad ubicada en la calle Sayos al 5500. En la inspección participaron también la Unidad Ejecutora de Registro y Regulación de Establecimientos Geriátricos, personal de control de Establecimientos Privados para Adultos Mayores, la Dirección General de Fiscalización y Control, la Dirección General de Control Ambiental y el Ministerio de Salud de la Ciudad.
Una vez en el lugar, los agentes se entrevistaron con la responsable, quien permitió el acceso al geriátrico. Durante el relevamiento de la documentación médica de los residentes, se observó que todas las constancias estaban firmadas por la misma doctora, a pesar de que esta había dejado de trabajar en la residencia desde mayo. Además, se constató que algunas constancias tenían fechas posteriores a su partida y presentaban una caligrafía diferente.
Ante estas irregularidades, el juez ordenó la confección de actas por infracción a los artículos 292 y 296 del Código Penal contra el responsable del establecimiento, así como la notificación de los artículos 29 y 30 del Código Procesal Penal de la Ciudad de Buenos Aires. También se dispuso el secuestro de toda la documentación médica posterior a mayo a nombre de la doctora y la clausura administrativa del geriátrico por parte de la AGC debido a las irregularidades detectadas en su habilitación.