
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires anunció una inversión de 76.000 millones de pesos para fortalecer el sistema de salud pública y mejorar la atención a los porteños. En un contexto donde la demanda hospitalaria creció debido a la situación económica, la gestión encabezada por Jorge Macri busca ampliar la capacidad de los hospitales, modernizar la infraestructura y sumar tecnología de última generación.
Entre las principales obras, se destacan la nueva guardia y consultorios externos en el Hospital Piñero, la ampliación del área de internación en salud mental del Hospital Rivadavia y la construcción de nuevos Centros de Especialidades Médicas Ambulatorias en Villa Urquiza y Recoleta. Además, se incorporarán dos Centros Integrales en Villa Devoto y La Carbonilla, junto con la inauguración del CeSAC N° 42 en Boedo.
En materia de innovación, el sistema público sumará RIS y PACS, dos herramientas que digitalizan y optimizan la gestión de imágenes médicas, mejorando la Historia Clínica Electrónica. Asimismo, la Ciudad destinará 15.000 millones de pesos en la compra de angiógrafos, tomógrafos y resonadores para garantizar estudios de alta complejidad con mayor precisión y rapidez.
El plan también refuerza el sistema Fila Cero, que permite agilizar los turnos y mejorar la experiencia de los pacientes. Con casi el 40% del presupuesto porteño destinado a salud y educación, la gestión de Jorge Macri reafirma su compromiso con el bienestar de los vecinos, priorizando inversiones que impacten directamente en su calidad de vida.